jueves, 26 de mayo de 2016

Happy Thank You More Please

Me he hecho Netflix. Quería ver una serie que resulta ser original de este medio y cuyo título me da algo de vergüenza confesar por lo que me dije a mí mismo: ya vale de tanta piratería. Además el primer mes es gratis ;). Concibo Netflix como un videoclub en casa pero con un catálogo un tanto limitado. Aún así, como ya estaba apuntado, empecé a bucear por su oferta en busca de alguna peli facilona que llevarme a los ojos. Tengo gustos peculiares en lo que se refiere al fast food de la gran pantalla. Cuando la gente no quiere complicarse mucho, ven una de acción intrascendente, una de ciencia ficción totalmente inverosimil o una comedia romántica de Jennifer Aniston. A mí, en ese momento me da por ver dramas, normalmente de parejas jóvenes y traficantes de amor moderno, caprichoso y a veces superficial y si tengo suerte con algo de doble fondo. Es un género no tan extendido pero donde abundan muchas joyas como algunas de las que ya he hablado: Her o The Lobster. En esta ocasión me decanté por Happy Thank You More Please.

Antes de nada y en vista de quien es su protagonista, tengo que decir que aunque me he tragado entera la serie de How I met your mother, creo que está bastante sobrevalorada. En gran parte por su protagonista, un tanto cansino, llorica y excéntrico. Pero no tengo la misma opinión de sus otros papeles. Amor y Letras por ejemplo me gustó bastante. Realmente no puedo decir que me encante, ya que insiste en ese papel de hombre cansado que me saca un tanto de quicio, pero por lo menos su labor de guionista reconozco que es plausible.

*SPOILER ALERT*

Una de las características que más valoro en una película es la de ser capaz de identificarme con los personajes y sus situaciones. Y lo reconozco, me gusta casi todo lo que Sam hace porque es lo que yo haría, o quizá por falta de valentía, lo que me gustaría hacer. Encontrarme un niño y echarle un cable. Quedarme anonadado cuando pasa una chica que me gusta, descubrir por casualidad el bar donde trabaja y buscar una excusa para entrar. Recibir un mensaje de voz y escuchar atentamente la neura de una amiga que necesita consejo. Ir tarde a una fiesta, pasearme por la casa como si nada me importara e irme con esa sensación de que algo de mi huella he dejado en aquel lugar. Quizá devolvería al niño antes pero entiendo que no lo haga, y creo que a mí también me costaría hacerlo. También, aunque en menos medida, le encuentro cierta gracia a lo de los 3 días, pero más que nada por la escena de la mañana siguiente en la que se da cuenta que quizá se habia dejado llevar más de la cuenta. Y definitivamente me gusta cuando la amiga le reta a que haga lo que necesite y sea el niño y no la chica lo primero que va a buscar.


Y hablando de la chica... Jugar con Kate Mara es como tener a Iniesta en tu equipo, es casi trampa. Ya resultó ser un buen reclamo en House of Cards, y en esta nos cuesta mucho no pensar aquello que de ser soltera tiene que estar loca. Al principio algo dura y escéptica, agradecida ante su descaro pero jugando con defensa de 5. La clásica pose, pues en seguida se derrumba tocando fondo un par de horas después con aquello que dice en su habitación: "Necesito que seas bueno", que la eleva al maximo nivel de "adorabilidad". Sinceramente, y una vez terminado el film, nadie puede creerse que esa relacion pueda durar. Solo Ted Mosby y su especial motivación por la repostería sentimental podría salvarlos. Pero hay que vender, y dejar abierto el final alimenta a todos esos consumidores de amor enlatado.

Pero no se retiren todavía, por suerte hay algo más. Dos historias de regalo, posiblemente en un intento de abarcar más público potencialmente identificable. La buena chica enganchada al chico malo y la pareja más o menos consolidada que se enfrenta al punto de inflexión más importante de su existencia. Historias positivas, bien contadas y bien interpretadas. Quiero pensar que hay gente que se enamora con los ojos cerrados y parejas que se crecen ante la adversidad. Y quizá por eso, porque las otras dos historias me convencen, me tengo que cargar la del protagonista. Lo siento Sam, tu nombre no es tan carismático y tu incipiente relación tampoco.

No hay comentarios:

Publicar un comentario